Escriben: Ximena Flores, Cynthia Cárdenas, Lucero Raymundo,
Rodrigo Lazo y Luisa Elvira Belaunde*
“Ya tenemos demasiados contagiados. El personal de salud está infectado. Mi persona está siendo referida por estar infectado. No tenemos oxígeno, no tenemos personal médico” (Evelio Paz, personal de salud de la Micro Red Huampami)
Desde el 6 de junio, cuando la población awajún retornó a sus comunidades luego de cobrar los bonos y programas sociales, el COVID-19 se expandió rápidamente en la cuenca del río Cenepa de la región Amazonas. El personal de salud y las autoridades indígenas alertaron repetidamente sobre el peligro en que se encontraban, pero debido a la poca capacidad de respuesta del Gobierno central y regional, no se realizaron acciones concretas oportunas para contener el incremento de los contagios y tratar a los enfermos. El día 27 de junio fallecieron con síntomas de COVID-19 tres awajún de las comunidades de Huampami y Kusu Kubaim y el 29 de junio, perdieron la vida otros dos pobladores awajún en la comunidad de Kusu Kubaim. Todos los fallecidos son varones y tres de ellos son mayores de 60 años y grandes conocedores de la cultura awajún. Ante la avalancha de decesos, el personal de salud del Centro de Salud Huampami IPRESS I-3 se ha visto obligado a considerar cerrar el establecimiento, lo cual dejaría sin ninguna atención médica a cerca de 10 000 los pobladores de las 65 comunidades awajún de la cuenca del río Cenepa.
Lentitud en la respuesta del gobierno
“Informamos a nuestra población que esta visita de los funcionarios de Lima y Región no ha resuelto nada sobre la pandemia ni se ha atendido con suficiente medicina para nuestros hermanos, es urgente el oxígeno y la implementación de las postas médicas en todas las comunidades de la región”. Salomón Awananch, presidente de ORPIAN-P (27 de junio 2020)
Entre los días 26 y 27 de mayo la Micro Red de Salud de Huampami recibió 25 pruebas rápidas que fueron aplicadas a los awajún que cumplieron la cuarentena después de regresar a sus comunidades caminando desde las ciudades del País. El 16 de junio, surgieron las primeras alertas de personas con sintomatología asociada al COVID-19, y la Micro Red de Huampani recibió 250 pruebas rápidas más. Los resultados arrojaron 82 casos positivos de COVID-19 en 6 comunidades awajún:
Intentando comprender cómo se había expandido el COVID19 por toda la cuenca, el personal de salud de Huampani concluyó que el contagio generalizado había sucedido a principios de junio, muy probablemente, entre el 4 y 6 de junio, cuando los pobladores de todas las comunidades se desplazaron a los lugares donde se realizó el cobro de los bonos y los programas sociales. Los encuentros con personas de fuera y la aglomeración entorno del cobro de los bonos sociales, fue el detonante de la expansión del virus por todo el río Cenepa.
Desde entonces, la situación del contagio se ha ido agravando y el desabastecimiento de medicamentos, oxígeno y la falta de equipos de protección, continúan. El contagio también ha golpeado al personal del Centro de Salud de Huampami. De los ocho profesionales que estaban trabajando ahí, 50% presenta síntomas de COVID-19.
El 27 de junio, cuando tres awajún morían en el río Cenepa, las autoridades de la provincia de Condorcanqui se reunieron con la viceministra de Interculturalidad y el viceministro de Transportes en Santa María de Nieva para discutir la situación. Esta comitiva llevó a Nieva medicamentos, equipos de protección personal y 06 concentradores de oxígeno, pero la Organización Regional de Pueblos Indígenas de la Amazonía Norte del Perú (ORPIAN-P) advirtió que esta dotación era insuficiente para atender a todas las comunidades del río Cenepa y las demás cuencas de la provincia de Condorcanqui.
En el siguiente video, filmado con celular el 28 de junio, el responsable del Centro de Salud Huampami, el obstetra Evelio Paz Tume, invoca a las autoridades Regionales y Nacionales a tomar medidas urgentes para evitar que el virus continúe propagándose e informa sobre las dos primeras las muertes de pacientes con sintomatología de COVID-19 sucedidas en la comunidad de Huampami debido a la falta de medicamentos y oxígeno en su establecimiento.
Cuando la noticia de las dos primeras muertes llegó a San María de Nieva, los representantes del Ministerio de Cultura y la Red de Salud de Condorcanqui decidieron que el lunes 29 de junio llevarán medicamentos, equipos de protección personal y dos compresoras de oxígeno para asegurar que el Centro de Salud de Huampami permanezca brindando servicios a la población. La rápida llegada de equipamientos y brigadas itinerantes a las comunidades awajún del bajo, medio y alto Cenepa, podría evitar una tragedia mayor. Esperemos que esta entrega efectivamente sea inmediata, puesto que desde que el video del obstetra Evelio Paz Tume fue grabado ya han muerto tres abuelos awajún más.
Subregistro de casos
El caso de Huampani muestra que existe un desfase en el registro de la información sobre contagiados y fallecidos indígenas en la región de Amazonas. Mientras el personal de salud de la Micro Red de Salud Huampami lanzaban sus comunicados de urgencia mediante sus celulares, la Diresa Amazonas demoraba en registrar estas muertes. Sorprende, por ejemplo, que, El 27 de junio, el Minsa informó que desde hacía cinco días la región de Amazonas no registraba muertes por COVID-19. Hay un grave desfase en los registros y esto genera subnotificación. En parte esto se debe, a que no se han aplicado las pruebas rápidas a todos los fallecidos, pero la sintomatología descrita por el personal de salud indica que muy probablemente se trata de casos de COVID-19.
Además, hay un desfase en el registro de la pertenencia étnica de los contagiados y fallecidos. La falta de un sistema de reporte que considere la variable étnica en la región de Amazonas impide que se registre el número real de casos indígenas, lo que a su vez, opaca la dimensión de la tragedia que está sucediendo en las comunidades. Urge que este sistema de registro coordinado con los centros de salud en los ríos se implemente para poder conocer los efectos de la pandemia en la población awajún y articular acciones entre la Diresa Amazonas y los sectores responsables del transporte para llevar rápidamente personal, oxigeno, equipos y medicamentos al río Cenepa.
Es necesario que esta reforma de los registros de casos de COVID19 sea implementada inmediatamente porque lo que está sucediendo en el distrito de El Cenepa puede rápidamente reproducirse en los otros distritos de la provincia de Condorcanqui.
Piden suspender las actividades del cobro de programas sociales y bonos que generan aglomeración
Hay una gran preocupación entre el personal de salud de la Micro Red Huampami por las actividades de entrega de los programas sociales y los bonos que generan aglomeración. El obstetra Evelio Paz Tume, en su video, manifiesta claramente esta preocupación pidiendo que se suspendan estas actividades de aglomeración.
“Solicito con suma urgencia a todas las autoridades que se suspenda todo tipo de pago, de cualquier programa social juntos, bonos,todo que se suspenda inmediatamente, que se postergue. Esa es la mayor forma de propagar la enfermedad aquí en las comunidades indígenas. Ya tenemos demasiados contagiados. El personal de salud está infectado. Mi persona va a ser referida, por estar infectado. No tenemos oxígeno, no tenemos médico, ningún personal médico. Por favor suspendan esas actividades e intervengan estas las comunidades que están en el abandono”. (Evelio Paz Tume, obstetra del Centro de Salud Huampami, 28 de junio 2020)
Esta preocupación ya había sido expresada por la Aidesep, desde el inicio de la cuarentena, y publicada en su pronunciamiento del 01 de abril dirigido al Gobierno peruano. El 25 de junio, 100 días después de declarado el estado de emergencia, la organización regional ORPIAN-P responsabilizó al gobierno de Martín Vizcarra y a su gabinete ministerial de poner en peligro la vida de la población indígena en Amazonas y Cajamarca con la política de retorno y el bono rural.
“Responsabilizamos al gobierno de Martín Vizcarra, y su consejo de ministros y asesores el sufrimiento y las matanzas de indígenas a consecuencia del COVID-19 ya que su política de retorno y el bono rural a indígenas no ha sido la mejor decisión para atender y cumplir sus funciones como gobernante de nuestro país” (ORPIAN-P, 25 de junio 2020)
Es urgente que se implementen las medidas requeridas por la población indígena y el personal de salud que convive y conoce sus necesidades No dejemos que el olvido y la invisibilización étnica siga llevándose la vida de los grandes conocedores indígenas, detentores de un patrimonio lingüístico y cultural de valor inestimable.
* El Observatorio Amazónico de la Universidad Nacional de San Marcos es un espacio que acompaña, articula y mantiene un registro de los acontecimientos en la región amazónica de nuestro país durante la pandemia y la post-pandemia del COVID-19.